7 trucos para llevarte mejor con tu impresora

¿Tu impresora es lenta, imprime cosas raras, siempre falla cuando más la necesitas..?

Estas son las 7 cosas que te harán mejorar la relación con tu impresora. Sigue estos sencillos pasos y podrás disfrutar de ella muchos años.

Limpieza, limpieza, limpieza.

Aunque no sea tan bonita como ese premio de asistencia a aquel master de diseño de ganchillo arquitectónico, a tu impresora también le gusta que le pases un trapillo de vez en cuando. El polvo provoca estragos en la entrada del papel y en partes internas de ésta. Sobre todo en las impresoras láser que cuentan con un rodillo llamado fusor y que se calienta a más de 400 ºC. ¿Has olido la pelusa recién hecha? ¡Mmmh huele que alimenta!

¿Por qué hay aquí una línea?

Tu fotocopiadora ha pensado que a tu documento le faltaba algo y, … ¡voilà! ahora tienes una bonita línea que atraviesa tu balance de cuentas. No te preocupes, tu fotocopiadora no se ha roto, es solo que, ¡está muy caliente!, te explico: Cuando hacemos fotocopias, normalmente las fotocopiadoras y algunos equipo multifunción, llevan un alimentador de hojas automático justo encima de la tapa del escaner. Todas las hojas pasan automáticamente y son escaneadas a través de un trozo de cristal muy pequeño que se calienta tanto que es capaz de fundir la tinta que va en el papel haciendo que se pegue en el cristal. No hace falta que tires tu equipo, limpia el cristal y ya tienes tu fotocopiadora como nueva.

¿Parece sencillo pero sabes poner bien el papel?

Casi todo el mundo lo hace, abrimos el paquete y lo capuzamos en la bandeja de la impresora. Esto hace que el papel entre pegado, o torcido con la consiguiente posibilidad de romper componentes internos del equipo. ¿Cómo se hace?, te lo explicamos. En primer lugar, si en tu impresora cabe un paquete de 500 hojas, no añadas 20, al final las vas a gastar igual. Saca todas las hojas del paquete y airéalas de manera que entre una fina capa de aire entre hoja y hoja.
Luego, abre las guías de ajuste del papel, suelen ser unas piezas móviles de diferente color que hacen que el papel permanezca colocado en el cajón sin moverse.
Coloca el papel y ajusta las guías, no hagas trampas, colocar el papel sin mover las guías hace que los papeles de la parte inferior queden arrugados o desalineados. Estos sencillos pasos alargarán la vida de los rodillos de goma que mueven el papel y te ahorrarán unos euros.

Fotocopiar un DNI, esa tarea imposible.

Es habitual ver cómo aún seguimos fotocopiando los carnets a doble cara, haciendo una copia, metiendo la hoja al revés en el cajón y volviendo a imprimir por la misma cara. Si eres de los que ha conseguido que esta tarea le salga bien tengo una mala noticia para ti, seguramente tu fotocopiadora lo pueda hacer ella solita, te explico. A día de hoy, casi todas las fotocopiadoras, e incluso, muchas de las impresoras multifunción, que tenemos en casa, llevan una opción llamada “copia de ID”, o similar, que consigue crear una copia de nuestro DNI con ambas caras en un lado del papel. Si, anverso y reverso de nuestro carnet en una misma cara, así es como le gusta a la Administración Pública y demás organismos. Con esta función conseguimos que las típicas manchas del fondo blanco del escaner desaparezcan dejando un fondo claro y una imagen nítida de nuestro carnet, lo de salir guapo en la foto es más difícil.

Calibrando, espere.

Tu impresora no entiende de horarios, de plazos límite ni tiene hijos que recoger en el colegio, así que cuando más prisa tienes, ZAS, ella tiene que hacer sus “cosillas”. Realmente, y aunque parezca que esto no va con nosotros, somos totalmente responsables de esto. Normalmente los equipos color grandes como fotocopiadoras y multifunción de gran tamaño, están programados para que cada 100 o 200 impresiones hagan una calibración de color, hasta aquí bien, pero, en tu oficina que lo único que sacas en color es el logo de tu empresa, a lo mejor te interesa ampliar la calibración automática hasta 400 o 500 páginas, incluso desactivarla, consulta el manual de usuario de tu equipo para saber cómo. Ese tono de azul no va a variar mucho y, cuando reinicies el equipo, la calibración está asegurada. Lógicamente si te dedicas a imprimir fotos todo el día te recomiendo que hagas la calibración de manera diaria o, incluso, varias veces al día. ¡A ver si vas a salir azul en las fotos!

Luces, cámara y se ha roto.

Las impresoras láser tienen muchas ventajas respecto a las convencionales de tinta líquida, sus cabezales no se secan, suelen ser más rápidas y su calibración suele ser automática, con lo que nos podemos preocupar menos de su mantenimiento. PERO, tienen un talón de Aquiles que no mucha gente conoce. En su interior montan un componente llamado unidad de imagen o comúnmente conocido por “tambor”. Aunque esto te suene a chino, lo has visto seguro, es un cilindro brillante que en la mayoría de equipos puedes sacar fácilmente. Este cilindro es sensible a la luz ya sea solar como artificial. De hecho muchos fabricantes recomiendan, en esas instrucciones que van en la caja y que ninguno leemos, que no se exponga a la luz mas de 1-2 minutos. Personalmente he visto “tambores” al sol como extranjeros en playas de levante. La diferencia es que los extranjeros aún viven para contarlo.